Hace mucho -no, la verdad es que no tiene tanto- tiempo, existía un niño que adoraba las galletas. Era tan gordo, pero comía y comía galletas. ¡Caramba, ese niño era una galletototota!
Un día, su mamá preparo 1000 galletas para su cumpleaños. Pero el mocoso, siendo el pequeño ijoeputa que era, se las jambó todas de un golpe y se infló grandote grandote como una galletota gigante.
Era tan redondo y tan chocolatoso que rodó por la calle y aplastó muchas casas.
Mucha gente murió, muchos perdieron hogares y familiares.
La solución: la vaca -tambien gorda- del pueblo fue ordeñada para llenar un vaso gigante de leche para remojar -yumm- la "galletota-niño-ijoeputa".
Pudieron detenerlo, pero lamentablemente el niño-galleta-hijo de su puta madre (ahora muerta) tuvo que ser detenido y encarcelado.
El Niño Galleta -como lo conocen sus compañeros de celda- tiene actualmente 46 años y ha aprendido a hacer canastitas tejidas con palitos de madera.
2 comentarios:
jajaja...me acuerdo de este cuento
yeeih!
aunqe nunca lo pude leer :P
pero ahora ya c me hizoo!
io qiero ser una galletotota
(:
mari..cociname♥
jaja
Jajaja! Qe Pedo con tu vida niña?
No manxes escribes genial, que pinche -mucha- imaginación tienes!
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