Entras a la habitación como si nada, caminando de puntitas para no despertarme. Como si no supiera ya que has llegado tarde, como si no pudiera olerte desde la puerta de entrada, ese aroma hediondo e insoportable que arrastras como una sombra. Te acurrucas a mi lado y tu cuerpo helado se encaja en el mío. Siento la asimetría de nuestra unión, la siento desde hace tanto.
Te repegas a mi espalda y tus hombros son ahora como una jaula protectora. Barrotes fríos y nada más. Por que ahora no eres más que eso, una figura helada sentada como estatua a un lado de la cama. Un asiento vació en el carro, un plato faltante en el comedor. La fuerza de tu abrazo no refleja la realidad. Ya no eres. Ya no somos. Fuimos pero no seremos.
Qué fui yo para ti? Tu soporte, tu amiga, tu verdad? Para mi eras todo y ya. Pero mirame ahora, yo sigo siendo quien siempre fui. Tu simplemente desapareciste.
Piensas que estoy dormida, y te quedas quieto, en silencio respirando junto a mi cuello, pretendiendo que duermes. Pero yo sé que no, por que yo si sé, siempre supe. Te conocí alguna vez, aparentas tranquilidad cuando por dentro te derrumbas. Por que cuando temiste yo te rescaté y cuando te desplomaste yo te atrapé. Y si reiste, yo reí. Si lloraste, yo te hice reir.
Esa es la verdad, eso es lo que soy. Siempre fui eso para ti, tu payaso. Quien te hacía la vida más fácil, más alegre, chistosa. Apoyándote en mi para salir del hueco, descargando en mi tus frustraciones y tu enojo. Y el triste payaso que trata y trata, pero siempre será eso: bufón.
Recargas tu cabeza en mi almohada y siento como mi cabello se jala debajo de tu peso. Concientemente me volteo dándote aún más la espalda. Ya sentiste el invierno? Ya te diste cuenta de que no estoy dormida? Puedes sentir mi piel erizada más de coraje que de frío? Los hombros tiesos como a la defensiva. Ya no bajo mi guardia.
Buscate otro payaso que te sirva de peón. Yo con mis gracias me voy muy lejos a buscare otro tirano, que al fin eso soy, no? Un bufón?
1 comentario:
Que brutal, y que metalizado y frio
Me gustan mucho las historias de nerds, de verdad me encantan.
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