No soy nada. Ha! Que trillado, pero es verdad. He llegado a la conclusión de que no soy nada. Solo me dedico a observar desde la segunda fila a los demás vivir. Hace muchos años que me sacaron del juego. O me madé yo misma a la banca?
Ya no se a quien culpar. Talvez no hay culpables en este partido. No hay arbitro. No hubo falta cometida. Solo el destino que ha decidido que mi equipo pierde este juego. Pero ya duró demasiado y ya me aburrí de estar así.
Ya vi a mis compañeros de equipo anotar goles, cometer faltas, hacer autogoles, ser expulsados como yo. Y salto de emoción cuando anotan, y grito furiosa cuando el otro equipo se sale con la suya. Qusiera estar ahí dentro, correr como lo demás, tener el balón en mi poder y dominarlo a mi antojo. Y quien quita, meto un gol.
Solo espero no estar demasiado lesionada como para volver a entrar a la cancha. Algún día.
2 comentarios:
es la primer ves que te leo y no sé si fué analogía a algo o juegas futbol en verdad, de toda formas por lo que entendí, me gustó
muy bueno muy bueno
Publicar un comentario